Cuando empecé a practicar Yoga hace ya 15 años lo hice como sustituto del fútbol, deporte que había practicado desde la infancia y que tuve que dejar de practicar con 28 años tras una lesión de columna. Una situación dramática que me cambió la vida.
Como no podía parar de hacer ejercicio me apunté a un Curso de Yoga de 6 semanas al que el traumatólogo dio el visto bueno.
Hoy día practico Yoga, Relajación y Meditación porque lo he convertido en mi profesión y además porque me ayuda a tener más calma, tranquilidad y relajación en las actividades y acontecimientos del día a día en mi vida cotidiana.
En el futuro me gustaría poder decir: Practico Yoga o cualquier otra cosa simplemente porque me apetece, porque me gusta, porque disfruto haciéndolo.
Y no es que ahora no lo disfrute, lo disfruto pero sigo utilizándolo por necesidad. Porque me ayuda a estar mejor de cuerpo y mente.
Después de 15 años de práctica de Yoga, Relajación y Meditación sigo atrapado en la creencia de que YO SOY MI CUERPO y MI MENTE.
Y aunque ya sé, porque me enteré hace algunos años y a veces lo siento, que no soy ni mi cuerpo ni mi mente, no lo tengo integrado y de forma espontánea y automática a menudo actúo como si lo fuera.
¿Qué cómo? Pues muy fácil, haciendo caso a mis pensamientos de turno que me vuelven loco, tapando mi calvicie o queriendo adelgazar y marcar músculo para tener un cuerpo más hermoso y te podría citar muchos otros ejemplos…
Me identifico con mi cuerpo y le hago caso a mi mente que emite todo tipo de pensamientos que me atrapan y me convencen… Y me encarcelan dándome la sensación de no ser libre, de no vivir mi propia vida.
Y en realidad soy yo el que se encarcela al hacerle caso a esos pensamientos, pero es que todavía no he aprendido a NO HACERLES CASO.
Cuando alguien me alaga me lo creo, cuando alguien me desprecia me lo creo, cuando soy yo el que me digo que no valgo me lo creo y cuando me digo que soy muy bueno me lo creo…
Ya ves… vaya panorama… como un cachorrito desvalido… ¿Te suena?
¿Es que la práctica del Yoga no me ha ayudado?
Si, por supuesto que lo ha hecho y lo hace día a día, pero confieso que todavía estoy muy verde, tan verde como las frutas colgadas del árbol cuando todavía les queda mucho por madurar.
La práctica del Yoga, la Relajación y la Meditación y también mi pareja me han enseñado a ser más honrado, más transparente. A poder denunciarme para decir la Verdad, esa que a veces duele y a veces ni siquiera duele porque no la vemos…
Desde que descubrí que yo no soy mi cuerpo, ni soy mi mente han pasado ya muchos años y los que pasarán hasta que esa idea se integre. Me la repito y se la repito a mi pareja, a mis hijos y a mis alumnos una y otra vez, a todas horas…
En el recorrido, haciendo camino he descubierto que trabajo como Profe de Yoga para repetir cada día todas aquellas ideas y conceptos que han ido llegando a mí, que me gustan, que me hacen vibrar y que reaniman la chispa interna que me da ganas de seguir viviendo…
Hace ya un par de años que doy Charlas para seguir repitiéndome a mí mismo todo aquello que todavía no he integrado. Y en las Sesiones Individuales que ofrezco repito una y otra vez esas mismas ideas y conceptos.
El día que me dé cuenta que hago mi trabajo y en general mis actividades cotidianas simplemente porque me apetece, te lo haré saber, mientras tanto voy a seguir practicando y haciendo todo en mi vida para Integrar la idea de que no soy mi cuerpo y no soy mi mente, sino que soy LA VIDA que habita en ellos y les da vida, que soy esa esencia que está en todo lo que vive y ya soy TODO y no necesito hacer nada para conseguir algo.
No puedo conseguir nada más en VIDA, pues soy la VIDA, CONSCIENCIA, FELICIDAD, AMOR INCONDICIONAL o llámale como tú quieras…. ¿Te parece poco?
Me gustó mucho escuchar una vez que NACER significa NO HACER
NO HACER: Vivir sin necesidad de hacer para conseguir. Emilio Carrillo te lo explica muy bien aquí.
Quién lo explicaba contaba que normalmente lo que nos sucede es que al nacer nos enseñan durante muchos años a HACER para conseguir. Para conseguir un novio, una profesión o estudios universitarios, un trabajo, una casa, unos hijos, bienestar etc etc… Y no vivimos.
Y con este aprendizaje se nos olvida el único y verdadero motivo por el que nacemos es NO HACER, es VIVIR.
Es sencillo; si somos vida, ya somos esa felicidad que buscamos, y la buscamos porque aprendimos a hacer y olvidamos no hacer que es vivir. Sobrevivimos en una especie de amnesia, como si estuviéramos dormidos…
Hay quien muere simbólicamente en vida, a través de una experiencia potente como un accidente, una enfermedad o una situación límite en la que despierta y es entonces cuando vuelve a nacer en vida y vive, supervive porque esa experiencia le ha hecho entender el verdadero sentido de la vida: VIVIRLA, disfrutarla sin tener que hacer nada…
Y hay quien vive toda su vida (la mayoría) haciendo para seguir consiguiendo porque no despierta y está muerto en vida…
De momento yo me considero muerto en vida porque me doy cuenta que todavía sigo haciendo para conseguir, no me ha llegado el milagro, y sigo mendigando ATENCIÓN, APROBACIÓN, ÉXITO, DINERO, CARIÑO, AMOR, ETC…
Algún día sonreiremos juntos con cara de bebé porque habremos vuelto a nacer… y estaremos viviendo, superviviendo, disfrutando. Y podremos afirmar que hacemos las cosas simplemente porque nos apetece, porque nos gusta… QUE PLACER, QUÉ DESCANSO…
La práctica del Yoga, la Relajación y la Meditación como parte importante de mi vida en los últimos 15 años me han conducido hasta aquí, hasta este momento en el que a veces siento que ni palante, ni patrás, que estoy muerto y a veces siento como ahora, escribiendo estas palabras que vivo, que supervivo y disfruto y mi corazón late tranquilo por un instante… QUÉ PLACER, QUÉ DESCANSO…
El Yoga, la Relajación y la Meditación me han llevado a darme cuenta del verdadero sentido de la vida, que es vivirla y disfrutarla…
Yoga no es solo ejercicio físico acompañado de una serie de técnicas respiratorias, mudras, mantras, relajaciones y meditaciones.
Yoga es una herramienta muy poderosa que te ayuda a aumentar tu nivel de conciencia y a transformar la manera que tienes de ver la vida, para que puedas verla desde otras perspectivas, que te permitan vivirla, supervivirla, disfrutarla…
SOBREVIVIR: Estar en la vida habiendo olvidado vivirla, haciendo cosas para conseguir otras. (Somos la mayoría)
VIVIR: Cuando descubres que eres vida y ya sabes que no necesitas conseguir nada porque lo eres todo. (A veces esta sensación parece que no es vida, ni palante, ni patrás) Porque todavía no está integrado. (Algunos)
SUPERVIVIR: Cuando mueres en vida, despiertas y re-naces a una nueva vida en la que dejas de hacer porque ya has integrado que lo eres todo y no necesitas conseguir nada. Y disfrutas de la vida… (Muy pocos)
Cuidado con la paradoja, en la que yo a menudo caigo: Para conseguir VIVIR y en última instancia SUPERVIVIR hay que dejar de querer conseguirlo. He aquí la trampa…
Así que deja de querer conseguirlo y simplemente reafírmate en la idea de que tú ya lo eres todo siendo lo que eres, dando vida a ese cuerpo y a esa mente que habitas.
Y sobre todo practica la observación que es lo tuyo, tu cualidad innata, para darte cuenta que no eres el cuerpo que habitas, ni la mente que observas a través de los pensamientos y de esa manera irás integrando la idea de que eres el que observa en vida. Si, ese que observa todo lo que sucede y no cambia, siempre es el mismo, la misma, desde antes de nacer hasta este momento.
Y si quieres ayudarte con las herramientas que a mi me ayudan cada día de mi vida, puedes acceder al Programa Online Yoga de Verano que he grabado para ti. Clika en la imagen para tener toda la información.
Un abrazo y hasta pronto. Observa y vive la vida 🙂
- Vivir no es lo que parece - 21 mayo, 2019
- Sexualidad masculina. Una historia personal - 24 abril, 2019
- El mejor regalo de Reyes - 10 enero, 2017
Qué buena reflexión y cuánta honestidad en tan pocas palabras.
Es verdad que enseñamos lo que queremos aprender, al final es la máxima de que el maestro y el estudiante en realidad están en constante intercambio de papeles ¿verdad? Yo muchas veces siento lo mismo con mis alumnos.
En budismo hay mucha teoría sobre la que analizar y masticar el cómo y el por qué de la confusión que llevamos encima, nos da muchas herramientas para verlo claro y no dejarlo en una idea bonita que suena a new age. No estoy familiarizada con las enseñanzas del yoga, sí con la práctica pero no con los estudios teóricos que hay detrás.
Decir que somos suficiente es quedarse corto, la idea de suficiencia es de por si limitante ¿no te parece? muchas veces me veo recordándome que «soy suficiente» y lo único que hago es alimentar el ego espiritual… en las enseñanzas budistas se estudia dos cosas que quizás ya las conozcas o quizás no, pero creo que es guay aportar un granito de arena. Se dice que somos un cúmulo de agregados: cuerpo, mente, sensaciones, acciones y conciencia. No somos nada de eso pero la idea de indentidad proviene de esa formación. Es muy interesante meditar sobre esto.
A mi personalmente la práctica del yoga me da paz y hace que tome conciencia de la conexión cuerpo-mente pero a la vez alimenta su realidad, me alimenta la ilusión de permanencia e independencia, supongo que me falta como digo todo el estudio teórico y analítico al respecto.
Perdona que me he puesto aqui en plan disertación, quizás hubiese sido mejor enviarte un mail privado. Es que me has inspirado mucho.
Te sigo leyendo.
Un abrazo
Lou
Hola Lou
Gracias por tu comentario. Me hace feliz que unas pocas palabras juntas sirvan de inspiración y podamos por un instante sentirnos uno. Gracias de corazón
Sunie